Seamos realistas. No siempre estamos motivados para hacer ejercicio y, a veces, es difícil encontrar esa motivación. Es aún más difícil encontrar motivación cuando ni siquiera disfrutas del ejercicio. Es importante aprender por qué es tan importante mantenerse activo, y todo comienza con un cambio de mentalidad al respecto.
Entonces, ¿por qué debo entrenar?
Hay cientos de buenas razones por las que es importante mantenerse activo, pero aquí tienes algunas razones que quizás no conozcas.
- El ejercicio te recarga. Treinta minutos o más de ejercicio vigoroso liberan endorfinas en el cerebro, brindándote energía y un intenso subidón natural. Esto puede ayudarte a tener más energía para tus actividades diarias y te mantiene activo.
- El ejercicio puede ayudar a tu positividad. Los estudios demuestran que el ejercicio es una excelente manera de ayudar a controlar la depresión. No solo libera endorfinas, sino que también ayuda a despejar la mente del estrés, la confusión y la preocupación.
- El ejercicio puede ayudar con tu vida social. Hacer ejercicio con otras personas que van al gimnasio para las clases de acondicionamiento físico en grupo puede ser una excelente manera de conocer gente nueva y ayudarse mutuamente a mantenerse motivados.
- El ejercicio te ayuda a dormir mejor. Trabajar el cuerpo y despejar el cerebro asegura una buena noche de sueño. Puede ayudar a regular los patrones de sueño problemáticos.
Cambia tu mentalidad
La clave más importante para mantenerse motivado con el ejercicio es tratar de cambiar tu forma de pensar. Si realmente no te gusta la idea de hacer ejercicio, debes cambiar la forma en que piensas, o nunca te levantarás y te mantendrás activo.
Empieza a pensar en el ejercicio como “estar activo” o “sentirse saludable”. Una excelente manera de comenzar es aumentar la cantidad total de movimiento y actividad en tu día. Por ejemplo, puedes comenzar caminando 10.000 pasos por día. Tampoco tienes que hacer ejercicio en un gimnasio. Por supuesto, los gimnasios son útiles y tienen muchos equipos, pero algunos días puedes salir al aire libre o andar en bicicleta. También puede probar el yoga o el baile como otro método para mantenerse activo.
Pasos pequeños
A veces solo tienes que dar pequeños pasos para mantenerte motivado. Por ejemplo, preparar tu ropa de entrenamiento o empacar tu bolsa de halterofilia la noche anterior puede eliminar varias barreras en la cantidad de decisiones que debes tomar al día siguiente. ¡O incluso puede tener tu mochila en tu coche lista para el día siguiente!
También puedes otorgarte premios por logros, como tu bebida favorita o nuevos zapatos deportivos. Úsalo como tu motivación para hacer tu entrenamiento para que puedas recompensarte con algo que disfrutes. Tal vez incluso puedas probar un entrenamiento a la hora del almuerzo. Esto te permitirá mezclarlo con algún entrenamiento al aire libre a la hora del almuerzo, y puede ser una forma increíble de experimentar la luz natural en tu entrenamiento. Considera dar una caminata rápida alrededor del barrio o un entrenamiento HIIT rápido antes de volver al trabajo.
Encuentra lo que funciona para ti
La clave es encontrar realmente lo que funciona para ti. Lo que podría funcionar para otra persona podría no ser adecuado en tu caso. Tu salud es tu viaje y, a veces, debes personalizarlo para que valga la pena. Continúa probando cosas nuevas hasta que conviertas tu rutina de ejercicios en un hábito. Recuerda que está bien tomar días de descanso. Pero siempre vuelve a levantarte y pelea al día siguiente.
1 comentario en «Cómo encontrar la motivación para entrenar»